El consejero de Medio Ambiente inaugura la Semana Internacional de la Trucha que tras 46 años se ha convertido en todo un referente a nivel nacional e internacional

Pregonero de lujo en la Semana Internacional de la Trucha de León. El consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta, Antonio Silván, ha sido el encargado de dar el pistoletazo de salida de estas jornadas que desde hace 46 años acoge León y que se han convertido en un referente a nivel nacional.

Silván, que apostó esta tarde por la “pesca sin muerte” –devolver la pieza al agua tras ser capturada- como una de las medidas principales para garantizar la sostenibilidad de los ríos de Castilla y León, destacó el importante incremento registrado en el número de pescadores en la Comunidad Autónoma, que ha pasado de 9.000 a 180.000 en apenas medio siglo.

“Hoy tenemos 20 pescadores por cada uno que existía hace 50 años”, añadió el consejero. Este es uno de los motivos, explicó, que junto a la contaminación, los cormoranes o los bajos caudales hacen que los ríos no tengan las misma capacidad “biogénica” que hace años.

Por ello, el consejero, que estuvo acompañado por el delegado de la Junta, Guillermo García, aboga por otra manera de pescar “más sostenible” y que está “en las manos del pescador” que puede decidir “si devuelve o no la trucha al río para que pueda volver a proporcionar otro lance de pesca inolvidable, o para que se reproduzca, en definitiva, para que ayude a mejorar nuestros ríos”.

Así, reconoce que se puede pescar “con muerte” de forma sostenible realizando una planificación y controlando cuando se extrae para que nunca sea más del crecimiento y productividad de esas poblaciones. “Eso requiere realizar más esfuerzos en el inventario y el análisis de las poblaciones, así como realizar planes de gestión de pesca rigurosos”, aclaró Silván.

Y es precisamente donde no se puede planificar adecuadamente, porque no se sabe cuánto se va a pescar al ser aguas de acceso libre y el número de pescadores no está limitado, cuando debe plantearse como herramienta la “pesca sin muerte” o “captura y suelta”. Una medida que se ha ampliado en las últimas dos décadas, pasando de un único coto de pesca sin muerte a los 47 que hay en la actualidad. A estos se suman otros 21 cotos mixtos con días sin muerte y 150 tramos libres sin muerte.

1.000 kilómetros “sin muerte”

“Hoy tenemos en Castilla y León nada menos que 1.000 km de nuestros ríos trucheros en los que se practica la pesca sin muerte”, subrayó Silván, que aseguró que algunos de esos tramos han mejorado notablemente sus poblaciones en los últimos años y que hay “bofetadas” para conseguir pescar en ellos. Así, señaló que este tipo de pesca no tiene que ser un “dogma de fe” impuesto a “machamartillo” sino que debe utilizarse como una herramienta de gestión que nos permita asegurar que no se produce una sobrexplotación de la riqueza piscícola.

Por otro lado, Silván reconoció ser un pescador en ‘stand by’ y que hizo sus “pinito” en la pesca “a la leonesa” hasta que sus responsabilidades políticas le hicieron abandonar la práctica de este deporte por falta de tiempo libre. “Los políticos a veces también trabajamos”, bromeó el consejero, que reconoció que la Semana de la Trucha se ha convertido ya en un acontecimiento deportivo y social reconocido y consolidado”.

Ahora, continuó, el objetivo es potenciar el turismo de pesca con una mayor repercusión mediática fuera de León y de Castilla y León y convertir “La Semana” en referente nacional de pesca de la trucha, “la fiesta grande de los pescadores de toda España y de otros países que, como nuestros queridos amigos franceses y portugueses, quieran acompañarnos”. “Protege el río, es de todos”, concluyó.